Por fin, libres

 

Educación democrática en Sudbury Valley School

GREENBERG, Daniel (2003)
Edición realizada por Marién Fuentes y Javier Herrero.

18 € (más gastos de envío)

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Por fin, libres es una obra de interés para docentes, alumnado, madres-padres y todas aquellas personas interesadas en construir día a día escuelas democráticas. Este libro, escrito por Daniel Greenberg, miembro del actual equipo adulto y del inicial que fundo el centro, recoge las experiencias de los veinte primeros años de vida de la escuela democrática autogestionada Sudbury Valley, la cual abrió sus puertas en 1968 en Framingham [Massachusetts] para chicos y chicas de cuatro a diecinueve años. Hay que destacar la concepción que Sudbury Valley tiene del aprendizaje y que deja patente en la introducción y previamente en uno de sus estatutos “la mejor forma de fomentar el aprendizaje es la automotivación, la autorregulación y la autocrítica” (p. 9) (…) El equipo de personas adultas considera que el aprendizaje ha de partir de la curiosidad del estudiantado, el cual aprenderá aquello que decida por iniciativa propia. Desde el primer día de escuela cada persona gestiona su aprendizaje así como su vida en ella. Esto es posible porque no hay presión ni coerción para pasar de curso u obtener calificaciones, ya que nada de esto existe en esta escuela. Libertad, autonomía, dignidad, igualdad, respeto, responsabilidad y apoyo son aspectos básicos en esta escuela. Y las páginas del libro dejan constancia de ello (…) La obra se estructura en dos partes (…) las cuales abordan distintas situaciones y vivencias que han sucedido en la escuela (…) La primera parte, Aprender, en la que se recogen múltiples aspectos que inciden en el aprendizaje [espacios, intereses del alumnado, agrupamientos, tiempo, juegos, evaluación, recursos, etc.] (…) cabe destacar la diferenciación que establece entre aprendizaje y clases. El primero es cuando una persona satisface una necesidad o interés por sí misma, utilizando diferentes recursos u observando a otras personas. Las clases se llevan a cabo previo contrato, es decir, son un acuerdo entre el alumnado y los docentes u otros estudiantes, realizando ambas parte un trato en el que se acuerda materia, lugar, día/s, hora y obligaciones. Otro tipo de clases en esta escuela son las convocatorias públicas, explicitando temática, fecha, hora y lugar, realizadas por una persona que quiere compartir sus pensamientos y conocimientos, que deben ser novedosos y únicos, conotras personas. Al igual que los deseos e intereses son la base de esta organización, lo son también en la consideración y vivencias del tiempo. Es decir, cada persona dispone del tiempo que necesita para la realización de actividades (…) Lo mismo ocurre en lo referente a las infraestructuras del centro, ya que si las de éste no pueden dar respuesta a las necesidades de los y las jóvenes, se busca fuera la forma de satisfacerlas.

En la segunda parte, La vida en la escuela, los distintos capítulos nos muestran la estructura organizativa (…) la gestión de la escuela se realiza en la Asamblea Escolar. Ésta se reúne semanalmente y normalmente es presidida por un estudiante durante un periodo de un año. Asistir a ella no es obligatorio y cada miembro independientemente de su edad tiene un voto, lo que supone que el alumnado tiene totalmente el control de la escuela al ser mayoría. Todos los aspectos del centro se deciden en la Asamblea Escolar (…) Por último, destacar, al igual que lo hace la escuela, que las madres y los padres son una parte importante de ésta tanto en la gestión como en la colaboración y participación en distintas actividades. En definitiva, el libro pone de manifiesto que otra escuela es posible y su lectura nos proporcionará claves e ideas para ello.

Se puede leer la reseña completa en la web del Centro de Documentación de Alternativas Pedagógicas: http://www.nodo50.org/cdc/cedap/CEDAPresnasudbury.htm