Ojalá no fuera así

Principio de precaución (2)

En diciembre de 2021 publicamos una entrada titulada “Principio de precaución” animando a madres y padres a reflexionar y valorar detenidamente sobre la necesidad, la eficacia y la seguridad de introducir las llamadas vacunas covid19 en los cuerpos de los niños sanos.

Como consecuencia de aquella publicación, sucedió lo que nunca antes había sucedido: salimos en una gran parte de la prensa local, autonómica y nacional con el titular: “Un colegio privado de Orba difunde bulos antivacunas entre los padres de los alumnos.”

Hace unos días, dos años y medio después, el catedrático de farmacología de la universidad de Barcelona y uno de los mayores expertos en farmacovigilancia de España y del mundo, el Dr. Joan Ramón Laporte, indica en un programa de RTVE, el medio de comunicación más oficial que existe, que fue un error inocular a los niños. Y el periodista que le entrevista, tras una larga digresión, finalmente acepta y se muestra de acuerdo (minuto 30:40 – 32:01).

Por otra parte, en un (o quizá “el”) debate sobre el acuerdo mundial sobre pandemia de la OMS, la Dra. Angeles Maestro aporta los datos de Euromomo relativos a la mortalidad infantil durante los años 2020 (gris), 2021 (azul oscuro) y 2022 (azul claro) donde se ve con claridad que la tendencia descendente de 2020 (es decir, que cada año morían menos niños) se rompe y los años 2021 y 2022 la mortalidad infantil crece (es decir, mueren más niños). Y la Dra. Ángeles Maestro se muestra indignada ante la ausencia de voluntad para investigar a qué se debe este incremento de muertes en nuestra infancia. (minuto 1:52:40 – 1:59:39)

Es interesante ver cómo en 2023 esta tendencia se ha ralentizado con respecto al fuerte aumento de 2022, aunque siempre muy por encima de la línea base, pero el exceso de mortalidad infantil retorna en 2024 con más fuerza aún que en 2022.

Como explica la Dra. Ángeles Maestro no podemos afirmar que el crecimiento de la mortalidad infantil en un país como el nuestro que no tiene problemas de saneamiento, agua potable, etc,… se deba a las inoculaciones, pero es de todo punto incomprensible que las administraciones públicas responsables no hayan dado, hasta ahora, ningún paso en investigar este hecho.

A la exposición de la Dra. Maestro, responde el Dr. Ángel de Miguel, catedrático de medicina preventiva y salud pública, de la universidad Rey Juan Carlos que, de nuevo, tras una larga digresión, reconoce y acepta que la vacunación de niños fue” inadecuada e innecesaria.”

No se trata tanto de tener razón o no, sino más bien de reconocer los errores propios. En nuestra visión, el error es una fuente excelente de aprendizaje, pero sólo si se reconoce.

Si se comete un error y no se reconoce, el error, entonces, resulta absolutamente infructuoso y nos conduce al autoengaño, un camino nada saludable.

¿Cuántas de vosotras conocíais esta información?

P.D.: Sería fantástico, si quien difundió nuestra entrada de diciembre de 2021 “Principio de precaución”, también lo hiciera con esta entrada y quienes lo reprodujeron, lo hicieran hoy con el mismo frenesí.

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